- El portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de la capital, Miguel Cazorla, recuerda que la decisión del equipo de Gobierno está en contra de la propia urbanística municipal y la ley autonómica
“La decisión del TSJA sobre el arbolado de la Plaza Vieja demuestra que no se puede gobernar a golpe de caprichos y de espalda a los almerienses”. Así lo ha asegurado el portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de la capital, Miguel Cazorla, tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía que determina que los ficus de esta plaza deben permanecer. “La sentencia es bien clara, reconoce los valores paisajísticos y ambientales de estos árboles y, sobre todo, reprocha que el Consistorio no sometiera esta cuestión a una evaluación ambiental”, ha determinado el dirigente de Cs en Almería.
Cazorla hace hincapié: “Ni se respetaba la norma urbanística municipal ni la ley autonómica”. “Con estos caprichos sólo logran confrontar y dividir a la ciudadanía. Tanto la concejal de Urbanismo como el alcalde, con el apoyo de VOX, sólo quisieron imponer su criterio”, ha valorado el edil de Cs. Desde Ciudadanos “siempre hemos mostrado nuestra disconformidad con el traslado del arbolado de la Plaza Vieja, igual que estamos en contra con cambiar de ubicación el momento a Los Coloraos”. “No hay que tenerle miedo a la participación ciudadana, a generar referéndums que recojan la opinión de los almerienses, porque nuestros vecinos tienen que ser parte activa de las decisiones que se tomen en este Ayuntamiento. Tienen que ser ‘arquitectos’ del presente y futuro de Almería”, ha valorado Cazorla.
“Al PP le da sarpullido utilizar la participación ciudadana”. Conociendo que aún cabe la posibilidad de que el equipo de Gobierno recurra esta sentencia, el portavoz de Cs en el Ayuntamiento de la capital pide que se tenga en cuenta “este primer revés”. “Se le da la razón a todos los colectivos sociales que se posicionaron a favor de mantener el arbolado en la Plaza Vieja”. De esta manera, Cazorla ha recordado que “hablamos de la Asociación de Amigos de La Alcazaba, del Colegio de Arquitectos, del Colegio de Ingenieros Técnicos Agrícolas, de asociaciones vecinales, de profesionales de la jardinería, de grupos ecologistas o de la Plataforma para la Conmemoración del Bicentenario del Levantamiento de Los Coloraos. A ninguno se les tuvo en cuenta”, ha aseverado, considerando que esta actitud del equipo de Gobierno responde más a un “régimen absolutista”. “Todo para el pueblo, pero sin el pueblo”.
A la espera del recurso de casación ante el Supremo, “nos alegramos de que los árboles continúen de momento en La Plaza Vieja y que estos nos sean sometidos a los caprichos mañaneros de la concejala de Urbanismo o del alcalde de la capital”. “No todo vale en política. No puedes gobernar sin los que te han dado la confianza, los almerienses”, ha subrayado Cazorla, para quien “la participación ciudadana no es reunir a aquellos que te dicen lo que quieres escuchar, sino recoger todas las sensibilidades y opiniones para, entre todos, elaborar la mejor propuestas”. Esta situación genera para el edil de Cs un nuevo retraso en la remodelación de la Plaza Vieja. “Habrá que formular un nuevo proyecto, por lo tanto, nos quedan meses para saber cómo se ejecutará esa remodelación. Aquí no estamos por la labor de gobernar, ahora nuestro alcalde está más pendiente de su promoción personal que de la capital”, ha ahondado Cazorla.